Cuando una situación que genera incertidumbre acaba desencadenando en tomar una medida protectora inconsciente que nos permite hacer frente a emociones y circunstancias desagradables.
Sin embargo, el uso rutinario puede reducir la efectividad de nuestro procesamiento emocional. Por lo que tendremos que reconocer las tendencias personales para que no dejemos que nuestros mecanismos de defensa superen nuestro progreso en la vida.
TIPOS DE MECANISMOS DE DEFENSA
• Represión: La represión es un pensamiento, sentimiento o recuerdo de una experiencia fuera de la conciencia. Muchas cosas pueden ser puntos de represión, incluidos los deseos prohibidos o incluso una situación dolorosa y emocionalmente difícil.
• Negación: La negación es negar a aceptar que algo existe o sucedió. Si algo importante para usted va mal, puede que simplemente diga a sí mismo: “Después de todo, eso no es tan importante”.
• Proyección: Cuando hablamos de proyección, hablamos de atribuir un impulso, o aspecto de uno mismo a otra persona. Diremos que se trata de la ofensiva como la defensa, por ejemplo, en el lugar de reconocer que estamos enfadados con alguien, las acusaciones de estar enfadado contigo.
• Racionalización: La racionalización crea una explicación aceptable, pero no de una situación, es decir, en el caso del alcohol, sabemos que no es algo beneficioso para nuestra salud, sin embargo, tenemos que buscar un lugar en la mente del consumidor para tener una razón para comprarlo.
• Intelectualización: Cuando tomamos una decisión pensando en algo lógicamente o fríamente y sin emoción.
• Formación de reacción: Dirija que este factor se refiere a lo que realmente nos gusta hacer. Como ser amable con una persona que no nos gusta.
• Regresión: cuando volvemos a una forma de defensa infantil, a veces el estrés puede llevarnos a las personas a los mecanismos de defensa más maduros.
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